Así lo afirmó Delia Vargas, la responsable del Merendero “A Pulmón”, del asentamiento 16 de Mayo en el Barrio Malvinas, en Salvador de Jujuy.
Cuando escuché el audio de Delia, y sentí su nudo en la garganta, pude saber que no la estaba pasando bien en la fría noche del lunes. Es que esa cancelación a última hora del transporte que llevaría a los 100 niños y 30 padres al complejo de Los Alisos, para disfrutar un día de campo y pileta, la dejó fatigada.
“Hace 3 meses no tenemos para el pan. Pero igual seguimos. Pero me comprometí a salir con ellos e hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance y cuando todo parecía iba bien, nos cancelan a última hora. Pedí ayuda a otra empresa y me cerraron la puerta. Pedí ayuda a una funcionaria, pero tampoco hallé respuesta”, indicó Delia en privado.
Obviamente, Delia podría estar haciendo mil cosas para llevar su vida personal y ocupación en tantas otras. Pero decidió marcarle la vida a los niños vulnerables del barrio dónde vive para así darles un rostro mejor de la vida y que el día de mañana sean hombres y mujeres de bien. Por que Delia y otras mamás, no sólo entregan una merienda. En esa tasa de mate, leche o té, va parte de su vida, que no recuperarán jamás. Pero que decidieron sembrarla para que otros, puedan mirar lo bueno que también puede ser la vida, ante tanta maldad que crece día a día.
Ella sólo pide ayuda para que alguien con un transporte de mayor porte, pueda llevarlos hasta Los Alisos. Ella ya le pidió a Dios. Y, ojalá Dios toque al que pueda ayudar, y pueda sacar ese nudo en la garganta que tiene esta responsable y mamá del merendero A Pulmón.
Su teléfono es: 388 50180949
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