En una noche inolvidable en el Teatro Martín Fierro del Complejo José Hernández, el reconocido pastor, conferencista e influencer Dante Gebel cautivó a cientos de jujeños con su gira internacional “Presidante”. Durante casi tres horas, desplegó una presentación cargada de emociones, humor, reflexión y profundidad, que mantuvo al público conmovido y atento de principio a fin.
Todo lo recaudado será donado a una institución jujeña.
La audiencia vivió una montaña rusa emocional: rió, lloró, aplaudió de pie y se dejó atravesar por las poderosas palabras de un orador que sabe tocar fibras íntimas. Con su característico estilo, directo, carismático y desafiante, Gebel ofreció lo que llamó su “discurso presidencial”, estructurado en torno a cinco ejes fundamentales: los orígenes, el tiempo, las cosas, la vejez y la muerte.
Al hablar de los orígenes, convocó a una reconexión con aquello que define nuestra identidad: nuestras raíces, nuestros valores, nuestra familia. Recordó que volver a lo esencial es vital para no perdernos en una sociedad acelerada. En cuanto al tiempo, lo describió como una fuerza implacable que no distingue entre ricos y pobres, y que avanza sin tregua. “El tiempo no se detiene ni se recupera —señaló—, por eso debemos aprender a vivir el presente con plenitud”.
Sobre las cosas, llamó a no vivir obsesionados con lo material, recordando que lo más valioso no se compra ni se acumula. Al abordar la vejez, instó a vivir con intensidad y mantener el alma joven, afirmando que envejecer es natural, pero lo verdaderamente trágico es dejar de vivir antes de morir. Finalmente, al hablar de la muerte, Gebel invitó a reflexionar sobre el legado que cada uno desea dejar: “Somos apenas un fragmento en un guion de la vida. Podemos pasar desapercibidos o dejar una huella profunda. La elección es nuestra y que si llega la muerte, que nos encuentre viviendo”
En el cierre, emocionó al público al declarar: “Este discurso menciona a grandes intelectuales, pensadores y referentes, pero no podía dejar de nombrar al más importante: Jesucristo. Él está con los brazos abiertos para acompañarnos hasta el final, si así lo deseamos”.
Gebel recordó que hace más de 20 años visitó por primera vez la provincia de Jujuy, y confesó que tal vez esta haya sido su última presentación en tierras jujeñas, debido a los compromisos internacionales y al paso inevitable del tiempo. Su despedida estuvo cargada de gratitud, emoción y una ovación que quedará en la memoria del público como testimonio de una noche verdaderamente única.