Un brutal doble crimen con sello mafioso ocurrió en la madrugada del jueves en la localidad bonaerense de González Catán. Un grupo de cinco encapuchados ingresó a un domicilio y asesinó a tiros a un hombre y a su hijo de 10 años. También hirieron a su esposa y a su cuñada. Luego de los asesinatos, los sicarios se tomaron selfies junto a los cadáveres, se llevaron las cámaras de seguridad de la casa y escaparon.
El caso quedó en manos del fiscal Federico Medone, titular de la UFI Temática Homicidios de La Matanza. Por estas horas, los detectives del caso intentan determinar el móvil del doble crimen. La principal sospecha que se analiza se trata un ajuste vinculado al narcotráfico, debido a cómo actuaron los asesinos y por lo que por ahora se sospecha de la víctima.
“Hace tres meses que se construyó una linda casa y hasta ahora no se le encontró ningún trabajo, tampoco nadie dice a qué se dedicaba”, relató un investigador del caso a Infobae sobre el hombre que asesinaron.
Los detectives ingresaron al domicilio ubicado en el cruce de Ñorquín y Río Cuarto para hallar una escena de horror. Jorge Armando Del Valle Vázquez, paraguayo de 37 años, y su hijo Isaías, de 10, se encontraban muertos tiros sobre un colchón lleno de sangre tendido en el suelo. Graciela Chamorro, la mujer de Vázquez y madre del niño, estaba herida de un disparo que le había rozado la cabeza y la pierna. También, la cuñada de Vázquez sufrió un disparo en el hombro.
Los encapuchados ingresaron a patadas y disparando al grito de ¡Policía! Una vez adentro, los testigos escucharon: “Maten a todos, mátenlo”. En ese momento fueron a buscar a Vázquez que dormía junto a su hijo de 10.
fuente: Infobae