Esta foto la saqué mientras realizaba una cobertura periodística en las calles de San Salvador de Jujuy en pleno centro capitalino.
La imagen de este señor adulto mayor, refleja muchas realidades. La pobreza, la inflación, el abandono, la indiferencia, la falta de compasión, el quiebre de la familia, los valores perdidos, el amor que es reemplazado por el dinero, la guerra perdida sobre lo que es correcto y una infinidad de cosas.
Sus ojos hablan por si sólo. Y la palabra más fuerte es: AYUDA, POR FAVOR.
Pero la responsabilidad no es sólo de un sector, sino de todos. Desde que somos pequeños nos enseñan a priorizar ser buenas personas y pasamos la universidad estudiando a hombres que nos hablan de buscar el bien del otro. ¿Qué pasó entonces?
Seguro algunos ya deben estar llenos de trofeos por sus logros en la maratón de la vida. Otros siguen corriendo. Otros inician la maratón. Otros sólo quieren el oro. Pero ¿Cuántos deciden parar para ayudar al que ya no puede correr para subirlo a sus brazos y ayudarlo a llegar?
Internacionalmente se habla de que la pandemia y que la guerra está direccionando a latinonoamérica a una crisis inflacionaria terrible. Pero hace rato la pandemia del egoísmo nos hizo naturalizar la insensibilidad. ¿Cómo me doy cuenta en dónde estoy? fácil. Sólo recuerda si tus metas, involucran a alguien más que no sea tu bienestar personal. Tal vez aún se pueda cambiar algo. Tal vez aún no todo está perdido. Tal vez, usted como lector y yo como periodista, podamos dar la vuelta la página e iniciar mañana, de otra manera. Que Dios nos de una mano para lograrlo.
Juan Ramón Quispe
