La ministra de Educación de Jujuy, Miriam Serrano, señaló que ante la amenaza de paro para el 23 de mayo por parte de los gremios docentes jujeños, el día de trabajo que no se trabaje será descontado del salario mensual. Serrano explicó que los docentes pertenecen al estado y si no se brinda lo acordado, no hay razón para pagar por un servicio que no se ha prestado. Esta declaración se enmarca en el contexto de una creciente tensión entre el gobierno provincial y los sindicatos docentes, quienes han manifestado su descontento por las condiciones laborales y salariales.
Por otro lado, los gremios docentes a nivel nacional han anunciado un paro de 24 horas para el próximo jueves 23 de mayo, afectando a todos los niveles del sistema educativo. Esta medida es una respuesta a los retrasos salariales y la falta de convocatoria del Gobierno a la paritaria nacional, estancada desde diciembre de 2023. Los sindicatos exigen que se reabran las negociaciones para poder discutir mejoras salariales y condiciones laborales adecuadas, ya que consideran que el actual estancamiento está perjudicando gravemente a los trabajadores de la educación.
En particular, los gremios docentes de Jujuy, como ADEP, que agrupa a los niveles inicial y primario, y CEDEMS, que representan a los docentes de nivel medio y superior, han decidido adherirse a esta medida de fuerza. También se suman otros gremios privados, lo que amplía el alcance del paro y refleja una unidad significativa en el sector educativo. Los docentes de Jujuy, al igual que sus colegas a nivel nacional, están exigiendo una respuesta concreta y efectiva por parte del Gobierno para solucionar los problemas salariales y laborales que enfrentan. La huelga se perfila como una protesta significativa que podría tener un impacto considerable en el sistema educativo, subrayando la urgencia de atender las demandas de los docentes y buscar soluciones justas y equitativas.